miércoles, 24 de octubre de 2012

Te entendes?

Sentimientos confusos... O no tanto. 
Creo que la vida te confunde con tantas cosas que van pasando. Porque mucha gente piensa que la vida de alguien de 21 años (como es mi caso) que solo estudia, que no labura, que es soltera, que relativamente puede hacer lo que quiere, es fácil, feliz y sin ningún tipo de problemas. Bueno, les cuento, les comunico y les informo que no es así, y creo que es todo lo contrario. Uno tiene de dilemas...
Es tan raro cuando no sabes que hacer... Porque hay problemas y problemas. De un lado, tenes esos problemas que no podes resolver por vos mismo, porque no tenes la manera ni las herramientas para buscar la solución en el momento en que surgen, solo esperar a cambiar, cuando la posibilidad aparezca, aquellas cosas que impiden que ese problema deje de ser problema; por otro lado, aquellos problemas que sabes que, si vos no te pones firme, no los vas a resolver en tu vida. 
Y ahí surgen todas las dudas habidas y por haber. Pero todas, hasta algunas aparecen sin uno saber que existían. "Y qué hago? Espero? Si espero... No. Lo enfrento, le hablo, arreglo todo eso. No no para... Mejor me callo, que se mate, si yo no elegí todo esto que está pasando, él/ella fue... No, ya fue, se lo mando, por escrito. No no, mejor cuando lo vea en persona, charlar seguro vamos a charlar... Y ahí decido si sigo remando o lo mando a la recontra re mierda... Pero si mejor lo hago antes?". Y así puedo seguir horas. Horas de insomnio, horas de estudio (porque mientras estudias todo se vuelve más interesante), que son obstruidas por pensamientos, constantes... Ojo, el problema que estoy marcando (que claramente se nota que es afectivo) no es el único que se impone en mis horas de no-sueño, pero si tengo que escribir cada cosa que me planteo, el volumen de hojas de la Biblia queda en segundo plano. 
A veces es tan difícil decidir... Podes parecer la persona más fuerte del planeta tierra, la más segura, la más madura, la más lo que quieras, pero cuando las cosas se te van de las manos, no sabes como retomar, y ahí surgen todas esas cuestiones, todas esas dudas existenciales que no sabes como mierda darle un cierre. Porque creo que nada tiene cierre. 
Quisiera que las cosas sean más sencillas, sin tantas vueltas, cual novela de televisión que tardan un año y medio en llegar a algo que todos sabíamos ya desde el primer capítulo que iba a pasar... Y ahí es cuando pienso si en realidad las cosas no las estoy haciendo sencillas yo, que tal vez, la solución está a la vuelta de la esquina, pero yo pienso que vivo en una rotonda. 
Serán más sencillas? O no? O en realidad son complicadas en serio? ... Será que espero que el otro arregle lo que tendría que arreglar yo? O en realidad yo tengo que esperar? Será que el miedo te paraliza?.
Si alguien tiene una respuesta a todo esto... Síganla  No se queden con palabras atoradas en la garganta, porque pueden llegar a no salir más.

2 comentarios:

  1. Para disipar una duda, cualquiera que sea, se necesita una acción y subir escalón por escalón. Hacer este blog es subir un escalón muy importante porque demuestra que hay ganas de hacer , obtener y aprender.
    A no quedarse quieta, siempre hay premio cuando se recorre un camino.
    Beso
    Pd: Tenias razón, Branca con Pepsi, no va!!

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    1. Gracias por tus palabras, de verdad!! Siempre presente!
      PD: te lo dije, la unión perfecta es la Coca con el Branca jajajaja.

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